15.3.13

El segundo ciclo de energía femenina: dos ciclos menores

Este artículo es continuación de este…

Como vislumbramos en el artículo anterior, hay dos ciclos menores que contemplar dentro del ciclo de menstruación – ovulación. 



Desde de día 1 de la menstruación al día de la ovulación, pasan arquetípicamente, 14 días de cualidad yin. En ese período menor también se da una trasmutación energética. Los primeros 7 días, los días en los que menstruamos, son yin y los 7 días restantes, hasta que ovulamos, son yang.

Desde el día 15 hasta el 28, pasan 14 días de cualidad yang. Los primeros 7 días son yin, aquellos días en los que el óvulo vive en el útero, y los últimos 7 días del ciclo son yang, días en los cuales el útero se prepara para soltar los restos de un ciclo no fecundado.

La comprensión a este nivel suele ser confusa ya que tantos yin y yangs se empiezan a mezclar. Lo importante a tener en cuenta es que luego del final de la menstruación hay un cambio energético, con lo cual podemos sentir diferencias en nuestras emociones, en nuestro cuerpo y en los pensamientos, que durante la menstruación eran de cualidad yin y hacia la ovulación son de cualidad yang. 

Lo mismo vuelve a suceder al finalizar la fase lútea del ciclo hormonal (proceso hormonal que mantiene el útero en condiciones para la fecundación). El óvulo, al no ser fecundado, muere y el útero se prepara para menstruar, esto sucede alrededor de 7 días luego de la ovulación. Durante la fase lútea la energía de este período es de cualidad yin y posteriormente trasmuta a yang.

Nuestro cuerpo no nos da referencias tan concretas en este caso, como lo es la menstruación o la ovulación, para darnos cuenta del momento en el que sucede la trasmutación energética. Este nivel de energía es mas sutil que el del ciclo de menstruación – ovulación por lo que requerirá una observación más fina de nuestra parte.

Estos ciclos menores también funcionan como ciclos de adaptación al ciclo mayor, una adaptación física, emocional y mental al cambio que sugiere menstruar u ovular. Esto es una pauta que puede sernos útil la hora de observar y reconocer los propios ciclos y etapas que estemos transitando. Cuando nos encontramos en fases yin, hay mayor rigidez, por ende menos adaptación. En las etapas yang nos es mas fácil acomodaros a lo que está sucediendo. Entonces vendría bien preguntarnos en cada momento qué nivel de resistencia estamos teniendo.

Diferencias en estos ciclos menores

Evidentemente también en este caso, cada mujer debe aprender a reconocer sus ciclos. Para cada mujer la duración de su menstruación es propia, lo mismo que la duración de la fase lútea y los días de pre-menstruación. De esta manera, al igual que en el caso del ciclo de menstruación – ovulación, los gráficos muestran ciclos arquetípicos y puede haber tantas variaciones de los mismos como mujeres en el mundo.


Click sobre la imagen para agrandar.


En el próximo artículo, el tercer y último ciclo de energía femenina: el ciclo de energía de los ovarios.